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Reportajes

Elecciones europeas 2024: el gran retorno de los patriotas


Marc Braudiller | 10/06/2024

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Hasta las últimas horas, los poderes fácticos hicieron todo lo posible, rozando o sobrepasando los límites de la honestidad y las reglas de la democracia, para frenar la marea de la derecha patriótica. Macron utilizó descaradamente las ceremonias del desembarco del Día D para hacer campaña pocos días antes de las elecciones, después de que Gabriel Attal hubiera dominado el debate en cada oportunidad. El resultado es claro e histórico en muchos sentidos. «No es un buen resultado para los partidos que defienden Europa, incluida la mayoría presidencial», reconocía lastimeramente el Presidente de la República en su discurso televisado del 9 de junio.

La lista macronista con el clarísimo nombre de Besoin d’Europe (Necesidad de Europa) ha sufrido una increíble derrota, cayendo del 22,4% de los votos en las elecciones europeas de 2019 (un resultado ya de por sí muy bajo) a menos del 15% el 9 de junio. Ha sido una violenta bofetada, no a una candidata a la que nadie conocía y que no es responsable de nada en sí misma, aparte de haber elegido las batallas equivocadas, sino al hombre que dirige la política de Francia desde 2017 en una única dirección, la de la Europa federal supranacional. Una Europa puesta en contra de los pueblos y de su derecho inalienable a seguir siendo amos en el suelo de sus antepasados. Bardella se permite ver en los resultados electorales «una desautorización punzante y un rechazo claro de la política del presidente de la República».

Marion Maréchal llama a la unidad

Juntos, Agrupación Nacional y Reconquista obtienen el doble de votos que el partido en el poder, es decir, alrededor del 35% en el momento de redactar estas líneas, sin contar las pequeñas listas (Patriotas, UPR, etc.). Sólo la Agrupación Nacional debería superar la barrera del 30%, es decir, casi uno de cada tres votantes. «Los franceses han dado su veredicto, y es definitivo», señaló Jordan Bardella, que saludó la noticia con «humildad y gravedad». «Ha soplado un viento de esperanza en toda Francia, y esto no ha hecho más que empezar«, dijo el cabeza de lista de la Agrupación Nacional. Su partido es ahora el mayor de Francia, con un peso sin precedentes en el panorama político. La lista encabezada por Jordan Bardella se impuso en el 94% de los municipios franceses. Para encontrar un resultado mejor para cualquier partido en la historia de las elecciones europeas, hay que remontarse al 43% logrado por el RPR-UDF en 1984, ¡tras la decepción de Mitterrand hace cuarenta años!

El nuevo poder electoral de los Patriotas abre enormes perspectivas a la derecha. Y algunas batallas internas. Éric Zemmour no aplaudió cuando Marion Maréchal dijo a sus militantes poco antes de las once de la noche: «Constato esta noche que el bloque nacional está casi en el 40%. La coalición de derechas a la que aspiro parece más necesaria que nunca. Por eso siempre he distinguido entre adversarios y competidores». Inmediatamente llamó a Marine Le Pen, Jordan Bardella, Éric Ciotti y Nicolas Dupont-Aignan a unir sus fuerzas, dando la espalda a años de tiras y aflojas en la derecha del espectro político.

Habrá un antes y un después de 2024. Tras años de propaganda europeísta a costa de los franceses, de innumerables intoxicaciones antinacionales por parte de los grandes medios de comunicación, y especialmente de los medios de servicio público, los mismos que deberían ser absolutamente neutrales, tras décadas de mentiras, manipulación y debilitamiento de Francia por parte de la izquierda y los defensores del globalismo, el electorado francés ha dado la puntilla. «No estoy de humor para celebraciones», ha declarado el europeísta, globalista y socialista Raphaël Glucksmann. En efecto, el 9 de junio pasará sin duda a la historia nacional como el pistoletazo de salida del gran cambio político del globalismo al patriotismo, que esta vez vuelve por la puerta grande. «No puedo hacer como si no hubiera pasado nada», dice Macron. El presidente de la República tomó nota, forzado y obligado, y disolvió una Asamblea Nacional sin mayoría que claramente ya no representaba al pueblo francés. A petición del partido de Bardella, la organización de elecciones legislativas los días 30 de junio y 7 de julio abre un nuevo y vasto desafío, arriesgado además, para el primer partido de Francia.

Europa también se mueve

La decisión de Emmanuel Macron también ha sonado como un trueno en toda Europa, atónita ante la magnitud de su derrota. En todas partes se subraya el riesgo asumido por el presidente de la República Francesa en un momento en el que también Europa da en gran medida la espalda a la labor de destrucción de naciones emprendida por los europeístas y perseguida activamente por Emmanuel Macron y sus aliados europeos. «Estos partidos [antieuropeos] se abren paso en todo el continente», señaló Emmanuel Macron en su discurso del 9 de junio.

De hecho, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, que encabezaba la lista de su partido, no muestra signos de desgaste: obtuvo el 28,9% de los votos, superando su resultado en las legislativas de 2022. En Austria, el partido patriótico FPÖ se impuso con casi el 30% de los votos. En Alemania, la Alternativa para Alemania se haría con 16 escaños en el Parlamento Europeo, 7 más que antes. En España, Vox lograría 7 escaños, tres más que en el anterior mandato europeo. En Holanda, el PVV, con el 17,7% de los votos, lograría 7 escaños. El partido portugués Chega, aliado de la Agrupación Nacional, obtendría 2 escaños.

Convertida en «la gran fuerza del cambio en Francia», según Marine Le Pen, la Agrupación Nacional ya no puede decepcionar. «Estamos dispuestos a ejercer el poder, a volver a poner el país en pie, a acabar con la inmigración masiva […], dispuestos a reactivar Francia», declaró Marine Le Pen. Le Pen pidió a los franceses «que vengan a unirse a nosotros», en una línea de la que también se hizo eco Bardella. El objetivo, dijo, es «cerrar el doloroso paréntesis globalista que ha causado tanto sufrimiento al pueblo».

Ya es la hora… Pero, a pocos kilómetros de París, los habitantes neerlandófonos de Bruselas han colocado a una lista islamista en segundo lugar en las elecciones federales.

Nota: Cortesía de Boulevard Voltaire