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Catargate: cuando los eurodiputados socialistas en el corazón de la corrupción sermoneaban a Orbán


Clémence de Longraye | 15/12/2022

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Conmoción en el Parlamento Europeo. Desde el viernes 9 de diciembre se han llevado a cabo varios registros en Bruselas y varias personalidades han sido interrogadas y puestas entre rejas con vistas a una posible inculpación. El escándalo de corrupción ha golpeado especialmente a los eurodiputados socialistas (miembros de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas o S&D), tan generosos con sus lecciones de moral.

El Grupo S&D en la línea de fuego

La investigación abierta por la Fiscalía Federal belga por «presunta organización criminal, corrupción y blanqueo de dinero» afecta de momento sobre todo al grupo S&D del Parlamento Europeo. Eva Kaili, vicepresidenta griega de la Asamblea y miembro de los socialdemócratas, fue detenida y encarcelada tras encontrarse «bolsas de dinero en efectivo» en su domicilio griego. Su compañero Francesco Giorgi, que trabaja como asistente parlamentario en Bruselas desde 2009, y Pier Antonio Panzeri, ex-eurodiputado del S&D y fundador de la ONG Lucha contra la Impunidad, también fueron encarcelados en relación con el caso. Además, se registraron y precintaron los despachos de los asistentes parlamentarios de Marc Tarabella y Marie Arena, ambos eurodiputados socialdemócratas.

Aunque las investigaciones están en curso y todos siguen siendo presuntamente inocentes, hay indicios de un fuerte lobby catarí (o incluso de corrupción, la investigación lo dirá) con estas personalidades. Esto arrojará luz sobre las posiciones de cada uno de ellos. Por ejemplo, tras una reciente visita a Catar, Eva Kaili declaró el 21 de noviembre ante los atónitos eurodiputados: «Hoy, el Mundial de Catar es una prueba concreta de cómo la diplomacia deportiva puede conseguir transformar un país . Catar es un precursor en materia de derechos laborales». Estas palabras van en la línea de las pronunciadas por Pier Antonio Panzeri en Doha en 2019, cuando consideró a Catar «una referencia para los derechos humanos».

Eurodiputados santurrones

En los últimos años, estos diputados no han dejado de dar lecciones de moral. ¿Su objetivo favorito? Viktor Orbán, que, según Marie Arena, ha convertido Hungría en «un país dictatorial». El mismo día en que la gran mayoría del Grupo S&D se opuso a una resolución sobre las violaciones de los derechos humanos en Catar, estos mismos socialistas europeos emitieron una declaración en la que acusaban al presidente húngaro de «no respetar el Estado de derecho». Esta aversión por el gobierno conservador húngaro no es nueva. En 2018, Panzeri calificó de «momento histórico» el procesamiento europeo de Orbán. Al mismo tiempo, su colega Marc Tarabella escribía: «¡Victoria! Hemos obtenido la mayoría para activar el artículo 7 contra el gobierno de Orbán. La corrupción y la violación de los valores no pueden quedar impunes». Cuatro años después, la «violación de valores» adquiere un sabor especial.

Estos eurodiputados no se quedan atrás a la hora de dar lecciones de moral sobre la cuestión migratoria. Con motivo de la crisis del Aquarius (barco de SOS Méditerranée) en junio de 2018, Panzeri denunció «la falta de solidaridad» del Gobierno italiano. Más recientemente, todo el Grupo S&D pidió que «no se criminalice más a las ONG» que ayudan a los inmigrantes en el mar y denunció «la dañina narrativa difundida por la extrema derecha».

Estos eurodiputados socialistas siempre responden para defender los «derechos LGBT» frente a los gobiernos conservadores de Polonia o Hungría o para hacer suya la retórica autoflagelante de Black Lives Matter. Pero esta vez, es probable que estos fiscales del bien se vean en el banquillo de los acusados.

Fuente: Boulevard Voltaire