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Una asociación parlamentaria transpartidos declara la guerra al wokismo


Marc Braudiller | 03/04/2023

«Señoras y señores, queridos colegas, me tomo la libertad de enviarles esta carta para alertarles sobre la creciente influencia de una nueva empresa ideológica en nuestra sociedad y sus instituciones: el wokismo».

El 22 de marzo, el diputado de la Agrupación Nacional por Loir-et-Cher Roger Chudeau tomó su mejor pluma para escribir a diputados, ex diputados, senadores electos, ex senadores y eurodiputados. ¿A todos? No, los diputados y senadores de La Francia Insumisa y los Verdes, considerados irremediablemente dañados, no recibirán la carta. No serán invitados el 12 de abril, cuando se anuncie la creación de una asociación parlamentaria transpartidos en una conferencia de prensa en la Asamblea Nacional.

Concebida por Roger Chudeau y Philippe Olivier, eurodiputado y estratega de la Agrupación Nacional, esta Asociación Francófona de Parlamentarios contra el wokismo pretende reunir a representantes electos de todos los partidos sensibilizados con esta lacra. «El wokismo tiene un carácter fundamentalmente totalitario, que sólo puede suscitar la resistencia de los republicanos y demócratas apegados a los principios de la República y al respeto de la verdad científica», escribe Roger Chudeau en su carta a los representantes electos. «Como representantes del pueblo francés, nos debemos a nosotros mismos reaccionar, denunciar y poner fin a este proyecto nihilista», concluye.

El proyecto no se detiene en las fronteras francesas, porque «el wokismo es un peligro para el mundo francófono», afirma Roger Chudeau, contactado telefónicamente por Boulevard Voltaire. Ha escrito a los presidentes de los grupos parlamentarios de la Asamblea Nacional para que se incluya un proyecto de ley en el orden del día.

En su manifiesto, la futura asociación advierte claramente del peligro que amenaza a la sociedad francesa después de haber hecho estragos en la estadounidense y en muchas otras: «El wokismo es un comunitarismo, incluso una forma de separatismo», insiste el texto. Funciona objetivamente como una empresa sectaria (el filósofo Jean-François Braunstein habla de una «religión woke»), inaccesible a cualquier diálogo contradictorio y tentada por el anatema, preludio de la violencia verbal y luego física.

Roger Chudeau tiene toda la legitimidad para lanzar este ambicioso dique parlamentario contra este formidable disolvente de civilizaciones. Ex inspector general del Sistema Nacional de Educación francés, fue consejero de educación del primer ministro francés Fillon (2007-2012) y consejero en los gabinetes de Gilles de Robien, ministro de Educación Nacional, de 2005 a 2007. Recientemente ha presentado en las redes sociales el Minuto Anti-Papá, en respuesta al «minuto semanal» del Ministro de Educación Nacional, cuyos excesos sigue y denuncia. Boulevard Voltaire le entrevistó recientemente sobre este tema.

Pero el reto de este compromiso es ir más allá del círculo de diputados de la Agrupación Nacional para dar contenido a la vocación transparente de esta nueva herramienta parlamentaria. Roger Chudeau se muestra confiado: «No veo cómo los diputados de Los Republicanos, Renacimiento y comunistas a nivel francés y europeo se negarán a unirse a nosotros», responde a Boulevard Voltaire. Acaso la diputada de Renacimiento Aurore Bergé no firmó en 2017 un proyecto de ley que prohibía la escritura inclusiva? Otras enmiendas o proyectos de ley hostiles a esta forma de revisionismo ortográfico han sido presentados en el Senado y la Asamblea en 2021 y 2022 por personas ajenas a la Agrupación Nacional, conscientes del desafío.

El próximo día 12, la asociación elegirá a su junta directiva, a su presidente (el cargo recaerá probablemente en Roger Chudeau), a sus vicepresidentes, secretario y tesorero. Este será el punto de partida de una declaración de guerra contra esta ideología. La Asociación Francófona de Parlamentarios contra el wokismo se opondrá a ella por ley, prohibiendo los encuentros racializados o sexistas y la transexualidad en el deporte, bloqueando «las subvenciones públicas a las organizaciones abiertamente wokistas» o interpelando al gobierno.

Pretende «crear grupos de vigilancia y asociaciones en todos los ámbitos de la vida pública donde el wokismo está muy extendido: escuelas, bibliotecas, artes (cine, teatro, literatura, etc.)». Ambiciosa, la nueva asociación quiere crear «una plataforma antiwokista en Internet para registrar todos los errores de este movimiento en curso» con el fin de cuestionar públicamente a GAFAM sobre su papel en la difusión de estas ideas. Por último, elaborará «un léxico crítico del wokismo que será ampliamente difundido» e «intervendrá en todos los medios de comunicación y redes sociales a escala nacional y europea para denunciar incansablemente el wokismo en todas sus formas». Sería bueno que las escuelas y las universidades no fueran olvidadas en este esperanzador contraataque.

Para que los falsificadores, los divisores y los mancilladores de nuestra historia no puedan seguir actuando sin contradicción.

Fuente: Boulevard Voltaire

Traducción: J.L.M.