A menudo se critica a la administración francesa por su dudoso gusto en siglas rebuscadas, pero parece que las asociaciones religiosas no se quedan atrás. Ahora existe una muy oficial Alianza de Mezquitas, Asociaciones y Dirigentes Musulmanes (AMMALE), que celebró su primera reunión hace unos días. Según un artículo publicado en Le Figaro el 19 de abril, ya existe en Europa una asociación de imanes llamada Consejo Europeo de Líderes Musulmanes (EULEMA), que representa los intereses de los musulmanes europeos. El acrónimo EULEMA se refiere evidentemente a los ulama, plural de la palabra alim, que designa a los sabios musulmanes sunníes. En cuanto a AMMALE, es una forma fonética de la palabra amal, que significa «esperanza». Es, por ejemplo, el nombre de un partido político del sur del Líbano. Esto demuestra que la administración pública no tiene el monopolio de los juegos de palabras.
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— Letras Inquietas (@let_inquietas) October 15, 2023
En resumen, AMMALE se reunió hace unos días, y este es su certificado oficial de nacimiento. El lanzamiento tuvo lugar el 7 de octubre, pero bueno, a veces la actualidad tiene sus razones que el diálogo entre culturas y la tolerancia humanista no… Y ya verán que no podía ser un homenaje a la batalla de Lepanto, el 7 de octubre de 1571, cuando las tropas cristianas de Don Juan de Austria derrotaron a los musulmanes del Imperio Otomano. Por supuesto que no, porque AMMALE (y por eso existe en primer lugar) está ahí para defender los verdaderos valores del Islam. Nos enteramos, de paso, de que AMMALE pretende «unir las voces y los esfuerzos de las instituciones y personalidades musulmanas de toda Europa, defendiendo el verdadero mensaje del islam, contrario a toda forma de extremismo, y protegiendo la dignidad y la ciudadanía de los musulmanes».
Así pues, si hemos entendido bien, el verdadero mensaje del islam no se encuentra en Iraq, Siria, Libia, el Sahel, Afganistán, Arabia Saudí o Yemen, por mencionar sólo el islam suní. No. Este verdadero mensaje de tolerancia, este «islam justo», se esconde en los estatutos de esta flamante asociación. Probablemente va a costar un poco de trabajo corregir la percepción distorsionada que trescientos franceses asesinados por terroristas islamistas (y por tanto, a priori, musulmanes) nos han dado, por desgracia, de esta religión de paz y de luz.
Y luego, como corolario del punto anterior, hay una segunda razón importante por la que existe AMMALE: la lucha contra la extrema derecha. Evidentemente. Esta extrema derecha es tan xenófoba y racista que su principal partido (la Agrupación Nacional, antes Frente Nacional) está dirigido por una descendiente de inmigrantes italianos que acaba de reclutar a una mujer de origen argelino como número 2 de su lista para las elecciones europeas: Malika Sorel. Por último, AMMALE (pero esto no le sorprenderá) se propone defender los derechos de los musulmanes. En resumen, no es un grupo de presión (por supuesto), no es una tapadera del islam (ni que decir tiene), pero está magníficamente imitada. Y no nos cabe duda de que cualquiera que se atreva a cuestionar el peso del islam en Europa será recibido por una armada de abogados. No se puede detener el progreso… bueno, la última vez que detuvimos el progreso fue en Poitiers.
Nota: Cortesía de Boulevard Voltaire
Arnaud Florac es cronista de Boulevard Voltaire.
