El proyecto de ley para amnistiar a los independentistas catalanes fue rechazado el martes por el Congreso. El gobierno socialista de Pedro Sánchez vuelve a sufrir un revés político. El periodista José María Ballester analiza el rechazo y explica sus consecuencias.
Raphaëlle Claisse: El proyecto de ley para amnistiar a los independentistas catalanes ha sido rechazado. ¿Qué ha ocurrido exactamente?
José María Ballester: Ha sido rechazada gracias al voto del centro-derecha, la derecha conservadora de Vox y el sector más radical del independentismo catalán. Estos últimos no se han convertido de repente en amigos de la derecha, pero están dispuestos a elevar el nivel de sus exigencias al gobierno del señor Sánchez. Esta votación es una severa advertencia al presidente del gobierno. El texto volverá a la comisión de justicia dentro de quince días. Es posible que sea rechazado allí, y entonces se presentará de nuevo al Congreso. Si se aprueba, pasará al Senado.
¿Es este rechazo un fuerte ataque contra el gobierno socialista?
Es un serio revés que dice mucho del inicio de este gobierno, que se instaló en noviembre pasado. Sánchez fue nombrado presidente del gobierno a finales de octubre y formó su ejeutivo a principios de noviembre. No es el primer aviso que envían los independentistas catalanes al presidente del gobierno para presionarle. El líder de la derecha ha dicho que el Gobierno está con respiración asistida. En cuanto al contenido del texto, el señor Puigdemont quiere una amnistía total para todos los delitos cometidos en los últimos años, incluido el enriquecimiento de la familia del señor Pujol, que fue presidente de Cataluña durante 23 años, de 1980 a 2003.
El señor Sánchez no quiere romper con la Unión Europea, así que tiene que mirar con lupa lo que está pasando en Madrid.
¿Qué soluciones crees que podría plantearse el Gobierno para salir de esta delicada situación?
Ceder aún más. En ese caso, el Estado español quedaría reducido a la mínima expresión y el señor Sánchez podría comprar unos meses de estabilidad hasta la próxima crisis. No veo una disolución anticipada del gobierno y la convocatoria de nuevas elecciones generales me parece muy improbable. Este rechazo a la ley afecta al gobierno socialista pero no lo hunde.
Nota: Cortesia de Boulevard Voltaire
Raphaelle Claisse es periodista de Boulevard Voltaire.
